Lo que no logró el gobierno de los Estados Unidos en más de 50 años, ahora pretende alcanzarlo por vía virtual. El videojuego “Call of Duty: Black Ops”, lanzado este martes en todo el mundo, transporta al jugador al ambiente de la Guerra Fría y planifica operaciones especiales. La primera de ellas asesinar al líder de la Revolución cubana Fidel Castro.
El lider cubano ha sido tan molesto para los magnates del capitalismo que, tras la humillación a las que les ha sometido durante mas de 50 años la pequeña isla cubana, resistiendo la agresion de todas la mayor potencia mundial y aliados, intentan matar su frustración en el mundo virtual. Con tecnología estereoscópica, el videojuego de la empresa estadounidense Activision requiere que el jugador maneje armas y vehículos de guerra para llevar a cabo operaciones militares en “territorio enemigo”, como la isla de Cuba.
La primera operación que ofrece “Call of Duty: Black Ops” es la de asesinar a Fidel. Esa operacion virtual en la isla caribeña se desarrolla antes de la crisis de los misiles de 1962, cuando el hijo de mafiosos John F. Kennedy era jefe de la Casa Blanca.
La empresa Activision afirma su nueva versión de “Call of Duty” permite jugar en internet hasta a 18 personas simultáneamente, lo que garantiza violentos enfrentamientos bélicos virtuales con espectaculares asesinatos y, sin lugar a dudas, un divertimento para psicópatas.
La lógica de este nuevo videojuego es doblemente perversa: por un lado, glorifica los atentados que de manera ilegal planificó el gobierno de los Estados Unidos y la mafia cubana contra el líder cubano -Fidel ha sobrevivido a más de 600-, y por el otro, justifica el terrorismo por "una buena causa", es decir, la perpetuación del sistema de dominacion capitalista.
No sabemos que pensaria el gobierno español si se sacara al mercado un videojuego en el cual el objetivo es la independencia de Euskal Herria y entre sus misiones está la de matar al rey de España; o si a Obama le haría gracia que la mision fuera acabar con la injerencia criminal de EEUU en America mediante una bomba en la Casa Blanca.
En definitiva, un videojuego que no hace mas que justificar lo que los medios de propaganda del régimen tanto critican: el terrorismo. Aunque, por supuesto, solo contra los "malos". Sin embargo, lo que nunca podran matar, ni siquiera con videojuegos, es lo que hace que personas como Fidel Castro sean durante su vida o tras su muerte en modelos para continuar la lucha: la indignacion ante la injusticia y la busqueda de un mundo mejor, donde la explotacion del hombre por el hombre no exista y en el cual los que producen sean los dueños de la produccion.
El lider cubano ha sido tan molesto para los magnates del capitalismo que, tras la humillación a las que les ha sometido durante mas de 50 años la pequeña isla cubana, resistiendo la agresion de todas la mayor potencia mundial y aliados, intentan matar su frustración en el mundo virtual. Con tecnología estereoscópica, el videojuego de la empresa estadounidense Activision requiere que el jugador maneje armas y vehículos de guerra para llevar a cabo operaciones militares en “territorio enemigo”, como la isla de Cuba.
La primera operación que ofrece “Call of Duty: Black Ops” es la de asesinar a Fidel. Esa operacion virtual en la isla caribeña se desarrolla antes de la crisis de los misiles de 1962, cuando el hijo de mafiosos John F. Kennedy era jefe de la Casa Blanca.
La empresa Activision afirma su nueva versión de “Call of Duty” permite jugar en internet hasta a 18 personas simultáneamente, lo que garantiza violentos enfrentamientos bélicos virtuales con espectaculares asesinatos y, sin lugar a dudas, un divertimento para psicópatas.
La lógica de este nuevo videojuego es doblemente perversa: por un lado, glorifica los atentados que de manera ilegal planificó el gobierno de los Estados Unidos y la mafia cubana contra el líder cubano -Fidel ha sobrevivido a más de 600-, y por el otro, justifica el terrorismo por "una buena causa", es decir, la perpetuación del sistema de dominacion capitalista.
No sabemos que pensaria el gobierno español si se sacara al mercado un videojuego en el cual el objetivo es la independencia de Euskal Herria y entre sus misiones está la de matar al rey de España; o si a Obama le haría gracia que la mision fuera acabar con la injerencia criminal de EEUU en America mediante una bomba en la Casa Blanca.
En definitiva, un videojuego que no hace mas que justificar lo que los medios de propaganda del régimen tanto critican: el terrorismo. Aunque, por supuesto, solo contra los "malos". Sin embargo, lo que nunca podran matar, ni siquiera con videojuegos, es lo que hace que personas como Fidel Castro sean durante su vida o tras su muerte en modelos para continuar la lucha: la indignacion ante la injusticia y la busqueda de un mundo mejor, donde la explotacion del hombre por el hombre no exista y en el cual los que producen sean los dueños de la produccion.
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