Democracia participativa, representativa y medios de comunicación.

DEMOCRACIA PARTICIPATIVA Y SOCIALISTA

La puesta en práctica de las más de 300 propuestas aprobadas en el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba,  ha demostrado las cualidades del modelo de democracia en la Mayor de las Antillas, que  consulta con el pueblo antes de ejecutar las políticas económica y social, para perfeccionar la construcción del socialismo y preservarlo para las futuras generaciones.

Fui testigo presencial, durante mi última estancia en La Habana (6 de noviembre a 16 de diciembre de 2010), del desarrollo de algunos de los debates habidos, que llegaron a más de ciento sesenta mil reuniones efectuadas en el seno de las diferentes organizaciones. en las que participaron más de ocho millones de ciudadanos/as.

¿DEMOCRACIA O PLUTOCRACIA?

La discusión de las reformas en todos los niveles de la sociedad reveló, una vez más, la confianza y unidad mayoritaria de los cubanos en torno a la Revolución, una lealtad que no evita o niega diferencias de criterios, con las cuales el proceso socialista se fortalece y consolida con el estudio y análisis de las propuestas, a las que se añadieron otras nuevas, modificándose 181 de un total de 311 medidas.

Algunos pronunciamientos, como explicó Raúl Castro durante el reciente congreso del PCC, no se verán reflejados en esta etapa, porque requieren profundizar en la temática, al no disponerse de las condiciones requeridas o por estar en abierta contradicción con la esencia del sistema socialista, sobre todo en lo que atañe a la concentración desmedida en la propiedad privada.

TELEVISION: MENTIRAS, MANIPULACIONES, BASURA

Como tendencia existió, en general, una gran comprensión y apoyo al contenido de los cambios económicos, laborales y sociales propuestos y debatidos, sin buscar la unanimidad de criterios, porque se pretendía, y se logró, una consulta democrática y rigurosa con la ciudadanía.

Una de las diferencias más notables entre la democracia participativa y la representativa (que padecemos en España), resulta de la constatación de que desde 1979 a 2011, ninguno de los gobiernos del Borbón ha organizado un solo referéndum popular, siquiera consultivo (los vinculantes jamás se celebrarán) sobre temas tan cruciales como autodeterminación, república, nacionalización, libertad de expresión, paro, aborto libre y gratuito, prestaciones sociales, vivienda, etc. Cuba es ejemplo de cultura, serenidad, sacrificio, solidaridad y salud física y mental.

Pero cuando, como en este llamado primer mundo, los medios de difusión únicamente sirven a la violencia del capitalismo salvaje, a un solo régimen político tan injusto como la monarquía, el desconocimiento y la ignorancia llevan a los pueblos al desastre.

¿A QUIÉN SIRVE HOY LA PRENSA?

Cuanto menor es la participación en las tareas públicas, mayor será la indiferencia del ciudadano ante la  incultura, la tonsura, la impostura, la tortura y la dictadura, parafraseando un tema de Francesc Pi de la Serra.

Como señalaba Julian Assange en una reciente entrevista: “Nuestro enemigo número uno es la ignorancia. Y creo que es el enemigo número uno de todo el mundo; es el desconocimiento de lo que sucede realmente. Solo cuando se empieza a conocer, se pueden hacer proyectos y tomar decisiones efectivas. Ahora bien, la pregunta es quién fomenta el desconocimiento. Bueno, pues son las organizaciones que tratan de mantener las verdades en secreto y las que distorsionan la información veraz, para falsificarla o tergiversarla. En esta última categoría se encuentran los medios de comunicación que pervierten el periodismo.

De hecho, opino que esos medios, por lo general, son tan malos que debemos preguntarnos si el mundo no iría mejor sin ellos. Distorsionan tanto la realidad del mundo que las consecuencias son… guerras y gobierno corruptos que siguen vigentes”.

 (…/…) Los medios podrían haber impedido guerras e invasiones, si hubieran indagado lo suficiente, si no hubieran reproducido únicamente la propaganda oficial. ¿Y qué significa eso? Esencialmente, que la sociedad no se enzarza por iniciativa propia en una guerra si tiene los ojos bien abiertos. De manera que, si dispusiéramos de un entorno mediático saludable, entonces también viviríamos de un entorno pacífico”

Suscribo todo lo dicho por Assange.

http://tenacarlos.wordpress.com/2011/05/05/democracia-participativa-representativa-y-medios-de-comunicacion/#comment-1371